domingo, 8 de noviembre de 2009

Pablo Pocaressi, QEPD

Como todo adulto con canas y raleado el pelo, sentimos el dolor de ver como cada día matan al policía que cumple con su deber, defendiendo CON SU VIDA al prójimo. Sin huelgas, ni piquetes, ni palabrotas, con el amor que da el servicio para con los demás. Ejemplo cotidiano, que parece pasar desapercibido para mucho intestino con patas que abunda en Argenzuela, arriba y abajo. Para nosotros, solo nos produce admiración, respeto y solidaridad con esos padres que brindan al país un verdadero HOMBRE, aunque esta solo le devuelve indiferencia. Más en este caso, que es por partida doble, ya que un hermano sufrió el mismo destino. Un abrazo enorme para esos padres, acompañando a la distancia su sentimiento y rogando, como ellos, que recuperemos alguna vez la Patria que extraviamos.

Los titulares dicen "el policia muerto"... Parece que el unico con apellido son D'Elía o los KK.
EL HUARPE

No hay comentarios: