domingo, 3 de julio de 2011

Ohhh!!! Que sorpresa!!!!

El silencio de los culpables. Así podría llamarse la película de estos días. “Todos sabían” el desmanejo de la banda de Bonnafanno. Periodistas, políticos, empresarios de todos los colores sabían que algo se cocinaba con feo olor en las entrañas de la UTE KKHebe.
Hoy mismo se observa la desinformación minuto a minuto. Se insiste con la misma nota, las mismas palabras, dando vueltas como el perro antes de echarse. No se investiga, ni siquiera las fuentes de la noticia, repitiendo bobadas. Si las propiedades están a nombre de otro, o no demuestran de donde salieron, afuera Schoky! Periodistas adultos, con años de experiencia, simulan asombro con el caso cuando desde siempre sucedió que las partidas del gobierno vienen asociadas a empresas amigas. Incluso los ATN de Menem tenían el mismo procedimiento… ¿De que joraca se asombran? Dejen de simular, por favor.
Una constante entre los choros KK... cuando los acusan, en vez de demostrar su inocencia, acusan a otros. Como si el mal de muchos, lavaran sus pecados. EL PROBLEMA DE NUESTRO PAIS ES LA INMORALIDAD ACEPTADA Y GENERAL, PRODUCTO DE LA DECADENCIA DE TANTOS AÑOS. EDUCACION, POLITICA, NEGOCIOS, IGLESIA Y SINDICATOS SE SUMARON AL PARTIDO MILITAR CON LA MISMA HERRAMIENTA METODOLOGICA: El narcotráfico y sus ramificaciones en todos los estamentos sociales, trastocando las instituciones y las ideas para suprimir los Valores que dignifican una vida.
Un error que padecemos –yo mismo hasta hace poco-, es medir reacciones sociales actuales con parámetros de hace pocos años nomás. Un proceso de lavado de cerebros, que masticaron los KK en su provincia y trasplantaron al país, es la negación de la realidad y su reemplazo por un relato repetido obsesivamente. Un cuento necesita del relator y ávidos escuchas aceptantes. Para ello los garantistas, los absolucionistas coparon la justicia; las fuerzas –una manera de decir- policiales son simples bolsas de trabajo para cuasi lumpenes, únicos aspirantes a blanco móvil por $1.800 menos su equipo, sin jerarquía ni moral; las escuelas son puntos de venta de nuevos consumidores de droga sin educación y con subversión de valores; los sindicatos buscan beneficiar a sus cabezas – mafiosamente platinadas- en desmedro del trabajo y el empleo de sus agremiados. El desguace de la moral social y la impunidad se traduce en que el fin justifica los medios ya que todos lo hacen. Hay hablar de tener corrección en los procedimientos ES SER COMO A UN DINOSAURIO LOCO. No sirven soluciones viejas, a problemas nuevos. EL HUARPE

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